Pues nada... ya que estoy pasando los días azules aquí en La Luz, pensaba buscarme un algo... un ligue... No nos confundamos: que yo ligue, así, sin más... bueno, algún caso se ha dado. Pero no es lo común. Ejemplo: Nada más llegar a la maravillosa casa de la Mejor Opción y de su Ganadera Salmantina tuve la posibilidad de entablar... amistad? con un chico precioso... y al que yo parecia no desagradar. Pero... qué pasó?
Empezando por el principio: la red de metro está extendiendo sus tentáculos como puede hasta la puertita misma de ésta casa que me acoge. Es lo que tienen los apartamentos de ciento cincuenta metros cuadrados del puto centro de las ciudades, que en cualquier momento les sale delante una boca de metro. Para redondear su maravillosa posición con una comunicación perfecta hacia cualquier otra parte, y tal... Vale, pues éstos pobres apenas duermen como es debido por los ruidos. Varios martillos neumáticos, excavadoras, palas mecánicas... convierten todo el exterior en un infierno de ruido y polvo -ésto me ha quedao un poquito macbethiano-. La municipalidad, sabedora, se está encargando de revisar toooodas las casas de los alrededores, para prevenirse ante la aparición de grietas o hundimientos de bloques posibles. Ahí está Barcelona, jejeje...
El timbre sonó cono tres veces antes de que yo me levantara de la taza y fuera a abrir. Once de la mañana en vacaciones... chico, no son horas! me estaba acicalando, qué pasa? Así que abrí y no había nadie
Diez minutos despues, el tipo gordo que debía venir a hacer el ojeo y las fotos previsoras a la casa volvió a intentarlo. Y ésta vez le oí. Lo que pasa que al abrirle, con toda la desgana con la que se le abre a un tipo al que no tienes ningun interes en atender, pues me encontré con un chaval de 25, delgadito, moreno, monísimo, de acento andaluz... Carpeta en mano, mira, me he encontrado con la chica -la Ganadera- en el portal y he quedado con ella para mañana a las diez para pasar a la casa. Ah, bueno, pos mu bien. Pos hasta mañana
Otros diez minutos más tarde vuelve a llamar. Que mira, que me sobra un poco de tiempo, y si lo puedo resolver hoy... ah, pues sí, claro. Pasa, pasa.
Madonna a toda la potencia que pueden los descaifenadillos altavoces de mi portátil -nota: comprar unos externos. Vi un par de ellos a doce euros en la fnac. Serán una mierda baratera, pero seguro que suena un poquito más alto que ahora!- El chico, haciendo su croquis a mano alzada, de pie, apoyado en su carpetita, en el recibidor... qué monísimo!... Y, qué? Vas al concierto?...
Y ahí que empiezo yo a sospechar que el nene no estaría muy en desacuerdo de entablar conmigo ésa "amistad" de la que hablé antes. Yo, tratando de mantener el tipo, tratando de no sonrojarme, tratando de aparentar aplomo, tratando de no parecer entusiasmado, tratando de hacerle ver que no me interesa, que no me gusta... Que no me gusta?... Pero, en serio, quién me grabó el programa "Ligar En Situaciones En Las Que Todo Lo Tienes A Favor", que lo hizo tan de puta pena?
De modo que, a pesar del vasito de agua fresca que le traje, a pesar de la conversacioncita abierta sobre Madonna, a pesar de hacerse el remolón al terminar dibujos y croquis de pie, en el recibidor... Le pregunté su nombre? Le dije que pensaba quedarme hasta el día 4? En definitiva: le entré? nohombreNOOOOOOOperobuenodequeestamoshablando!!!???
Y el primohermano del aTientas que solía visitar siempre que he venido aquí ha cerrado. Y anoche fui a otro sitio, pero muy mal... nada de nada...
Y así, en una situación de pobreza grande, vacacionando sin gastar un duro en casa de amigos, mírame: Lo que más me cierra la glotis es la frustración porque no se ligar...
Maduro, eh?...
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